lunes, 21 de julio de 2008

¡Al fin libres!

Quiero ser rescatado,

no negociado. La libertad es vida, mas si me la privan ya muerto estoy. Mi dignidad no es mercancía. No quiero, ni deseo ser negociado, es más, ordeno como última voluntad que a mi libertad NO se le ponga precio. Es otra manera de expresar la voluntad que se ordena mediante la organización Libres para siempre, cuya declaración está siendo difundida en Internet.

Su texto en el siguiente enlace:Libres para siempre

2 comentarios:

Carlos Correa dijo...

Excelente pensamiento ... siempre debió ser así, sin precio por la vida humana.

Un saludo y le cuento que volví.

Carlos Julio dijo...

¡Excacto!

No hay precio alguno por la integridad de un ser humano.

Hola mi estimado don_jorge.

En mi trabajo he estado a full y el tiempo me faltaba.

Gracias por tus buenos deseos.

Estamos de nuevo en contacto, gracias a Dios.

Un abrazo desde Ecuador.

Bendiciones y saludos cordiales.

Carlos Julio