jueves, 18 de septiembre de 2008

Plagio, engaño, equivocación o piadosa coincidencia

Desde que apareció la denuncia del periodista Melquisedec Torres Ortiz, muy bien soportada, por a su parecer el plagio de la obra escultórica del maestro Andreu Alfaro por parte de nuestro artista vernáculo por adopción Milton Morales Grillo, he venido siguiendo con atención su desarrollo.

Gemelas danzantes - Milton Morales Grillo


Melquisedec es un periodista de investigación que no le teme pisar honorables callos cuando se trata de denunciar lo que a su juicio de periodista (¿Acaso el periodista que se precie de serlo no es un ente de control social?) debe ser conocido por la masa pública con opinión o sin ella. Recuerdo la amplia investigación que le hizo a un alcalde de Pitalito de ingrata recordación y que le fuera publicada a página entera en Diario del Huila, denunciando el despilfarro presupuestal y el engaño con la supuesta televisión comunitaria que no cuajó. Ninguno de nuestros periodistas locales de ese entonces se atrevió a hacerlo. El burgomaestre tenía sus cuerdas muy bien amarradas.

Ahora Melquisedec toca a uno de los intocables. Denunció en la revista La Región que el maestro Milton Morales Grillo, a juicio del periodista, plagió con su escultura Gemelas danzantes una de las esculturas del valenciano Andreu Alfaro. De inmediato nuestro reconocido artista, a quien por este discutido caso no se le quitan sus méritos, publicó una declaración a la opinión pública en donde más que refutar lo señalado por el periodista se extendió en mostrar su hoja de vida artística con estudios, exposiciones, galardones y todo triunfo nacional e internacional; a tocar las fibras sentimentales por su arraigo opita y transparentar la danza de millones invertidos en la escultura. Todo muy creíble porque a Dios lo que es de Dios y al César lo que es del César. A ese comunicado a la opinión pública comenté en la misma revista reconociendo las calidades y cualidades de nuestro artista, asegurando mi concepto de que la IDEA de su trabajo escultórico no es original.

Lógicamente surgieron defensores del artista y detractores del periodista. La página de Radio Sur ha sido plataforma de los defensores y a ellos respondió el periodista con altura y profesionalismo haciendo frente a posibles denuncias por injuria y calumnia (Contravención o delito este -no lo se- que se ha convertido en recurso de cajón de presuntos infractores de la Ley y que en el periodista las denuncias en ese sentido pasan a ser más que un baldón, un hito meritorio.)

Finalmente se publica un concepto de la Universidad Surcolombiana que por su erudición y academismo nos deja a los legos más enredados que un bulto de anzuelos, pero que en líneas generales da a entender que eso de los plagios deja de existir en la gran marea de los sentimientos artísticos. Equivocado estaré en su interpretación. Hay escritores, académicos y comentaristas especializados que creen que quienes no hemos pasado por ciertas aulas de educación superior o no nos codeamos con la élite artística o literaria no poseemos el mínimo de sentido común para apartarnos de sus aseveraciones.

Ríos de tinta quizá sigan corriendo en uno u otro bando. Milton seguirá siendo uno de nuestros artistas a mostrar nacional e internacionalmente, pero de que su obra de las gemelas NO ES ORIGINAL -plagio, engaño, equivocación, piadosa coincidencia o recurso artístico, como usted querido lector quiera calificarlo- es pretender tapar el sol con un dedo al asegurar lo contrario. Finalmente, para ilustrar, van las siguientes fotografías comparativas hasta en donde el número de tubos, 16, es igual en las dos esculturas. Los colores -que recuerdan nuestras selvas, etc., etc., etc.- y la duplicación a la inversa de las estructuras no pasan de ser recursos para darle originalidad a la "creación" artística. Aún, sea como sea, es obra que engalana la entrada a la zona urbana de nuestra querida ciudad. Vean, comparen y juzguen.





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lunes, 11 de agosto de 2008

A mis amigos y lectores de OBSERVATORIO

Creo les debo una explicación del por qué mi demora en volver a aparecer con mis inquietudes de escribidor. Va para un mes sin una nueva entrada aunque para sorpresa mía he recibido comentarios de artículos que escribí hace más de seis meses y a los que hoy he dado respuesta.

Una de esas enfermedades silenciosas que jamás imaginé tener y que los médicos y especialistas vienen intuyendo desde hace varios meses, al fin se reveló. Alguno de mis genes se cansó de la disciplina biológica y parece mutó para causarme problemas de producción de glóbulos en la médula ósea. Ahora estoy de regreso a mi casa luego del encierro de diez días en una clínica de Neiva. Espero que el tratamiento y nuevos exámenes a los que estaré sometido me mantengan "al pié del teclado".


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lunes, 21 de julio de 2008

¡Al fin libres!

Quiero ser rescatado,

no negociado. La libertad es vida, mas si me la privan ya muerto estoy. Mi dignidad no es mercancía. No quiero, ni deseo ser negociado, es más, ordeno como última voluntad que a mi libertad NO se le ponga precio. Es otra manera de expresar la voluntad que se ordena mediante la organización Libres para siempre, cuya declaración está siendo difundida en Internet.

Su texto en el siguiente enlace:Libres para siempre

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miércoles, 9 de julio de 2008

¿La o diosa Ingrid?

Al fin alguien lo dijo y ese es Daniel Samper. Ya estaba asqueado con tanta pantalla mediática en donde una vez más el tropicalismo ingenuo exalta a la problemática Ingrid a la presidencia, y a cuanto premio mundial existe sin descartar dizque el Nobel de Paz. ¡Abrase visto!

Cuántos problemas le causó al Estado y a la cabeza del gobierno colombiano la terquedad de la "heroína" en contra de las recomendaciones de no ingresar a la zona insurgente donde al final terminó plagiada. Se olvidan los señalamientos desfavorables y casi injuriosos de la señora Pulecio y sus hijos contra el presidente Uribe, cabalgando llorosa en los hombros de Sarkosy. "Todo se lo debo a Francia" lo dijo Ingrid en su otra patria. Tamaño híbrido a quien recomiendan lanzarse a la presidencia. Ahora falta que la condeconderen con la Gran Cruz de Boyacá y cuantas medallas haya en Cámara y Senado.

Cuando pase esta euforia se empezarán a conocer verdades... Algún día Clara hablará (Y ella que se ofreció voluntariamente, esa sí con tamaña fidelidad, a no dejarla sola en su cautiverio). Ya habló su esposo Lecompte. Pero dejo que Daniel Samper, que tomo de su columna en El Tiempo, diga lo que muchos, pero muchos colombianos pensamos. Son injustas tantas falsas coronas de gloria frente a la humildad de nuestros verdaderos héroes militares y policías que le duplicaron años en cautiverio y entregaron su libertad y aún su vida en defensa de nuestras vidas, honra y bienes.

"Probablemente no ha habido ningún relato de secuestrados tan dramático como el del sargento John Jairo Durán, rescatado la semana pasada con Íngrid Betancur y otros trece rehenes, cuando contó cómo habían sido las últimas semanas del capitán de la Policía Julián Ernesto Guevara, muerto prácticamente en sus brazos en enero del 2006 al cabo de siete años de cautiverio. Él y sus compañeros cayeron en manos de la guerrilla tras resistir hasta el último cartucho durante una emboscada en Mitú. Guevara ya casi ni comía pues, dijo Durán, los carceleros de las Farc le exigían, para darle su ración, que mendigara el pan e insultara su uniforme, y el capitán se negó a humillación semejante. Falleció a los 40 años, quebrantado, encadenado, esquelético y en estado de extrema debilidad.

De no haber sido por el conmovedor relato de Durán, quizás nunca habríamos sabido de este valiente oficial de modestos orígenes que quedó sepultado para siempre en la jungla, lejos de su madre, su mujer y su hija. Como Guevara y Durán, decenas de ciudadanos ignorados -en su mayoría soldados y policías- sufrieron y aún sufren la infame esclavitud del secuestro. Se justifica, pues, el regocijo con que celebramos todos el feliz suceso de la operación 'Jaque', cuya precisión quirúrgica contradice el supuesto oxímoron de la "inteligencia militar". Bien merecen el reconocimiento por la hazaña las Fuerzas Armadas, el presidente Uribe, el ministro Santos y cuantos participaron en ella. ¿Hubo dinero de por medio? Poco importaría: es buen trueque derramar dólares para no derramar sangre.

Hay, sin embargo, dos ingredientes del festejo que me preocupan, y procuraré escoger cada letra y cada palabra en lo que voy a escribir porque, como están las cosas, un malentendido podría atraerme el diluvio universal de oprobios. El primero es que existe un odioso toque clasista en la celebración. Proclamo mi alegría por el rescate de Íngrid, mi admiración por la actitud que observó durante el cautiverio (igual a la de casi todos los demás rehenes) y mi aplauso por sus declaraciones solidarias. Pero el huracán mediático que sopla desde Francia -y esto no es culpa de ella, por supuesto- olvida a los ciudadanos humildes que atravesaron penurias iguales o peores, como el heroico capitán Guevara.

Se propone a Íngrid para el Premio Príncipe de Asturias y el Nobel de la Paz. ¿Por qué no también al subintendente John Frank Pinchao, que escapó tras nueve años de cautiverio, anduvo por la jungla 17 días y ofreció datos claves para el rescate del miércoles pasado? ¿Por qué no a los uniformados aprehendidos mientras prestaban un sacrificado servicio a sus compatriotas que cumplirán once años enjaulados como animales? ¿Por qué no el cabo segundo William Pérez, de quien Íngrid dice que le salvó la vida con sus palabras y su cuidado? Surge un agravio comparativo cuando se exalta solo el indudable valor de la secuestrada de mejor familia y se ignora a los demás. Más aún cuando, según la prensa europea, Íngrid dijo en París: "Le debo todo a Francia" (Público, Madrid, julio 5/08).

El segundo elemento irritante es el bochornoso espectáculo político que desató el rescate. Casi todos los grupos se descaran por conquistar ese as electoral que se ha vuelto Íngrid y ya calculan alianzas y réditos de su apoyo. Quienes le tenían escasa consideración cuando era una candidata marginal y sin posibilidades hoy le cantan himnos de gloria y aspiran a que les conceda un baile, una mirada.

Lo mejor que podemos hacer es olvidar la mezquina vara de premios, enfocar todos los esfuerzos por sacar a los secuestrados que aún siguen en el infierno y convencer a las Farc de que su aventura no tiene futuro y debe terminar cuanto antes y de la manera menos sangrienta posible.

cambalache@mail.ddnet.es

Daniel Samper Pizano"

¿Ya leyó a Poncho Rentería en "Ingrid se está pifiando"? Ahí le dejo ese enlace para reafirmar, desde otros puntos de vista, lo que dice Daniel Samper y miles de colombianos más.

El escritor izquierdoso Fernando Vallejo (quien parece conocerla a fondo en sus pretenciones políticas) le dedicó un no muy delicado artículo cuyos principales apartes publicó La Repúbica de Montevideo Uruguay. Desde Brazil la calificó de oportunista y manipuladora. ¿Qué razones tendrá?


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jueves, 3 de julio de 2008

Recato musulmán

Las normas musulmanas para el comportamiento humano son tan normalmente aceptables para sus religionarios, como sorprendentes y cuestionables para quienes no lo son, especialmente cuando se refiere al comportamiento, trato y obligaciones de las mujeres. El mundo se acuerda del humillante burka que debían -y aún subsiste- usar las mujeres afganas so pena de ser apaleadas por la policía musulmana en Afaganistán. Poco o nada humillante según el gusto de los occidentales pero bastante cuestionado en algunos países -remember Turquía- es el uso de la pañoleta para cubrir el pelo de las musulmanas. Ahora sorprende conocer que una confeccionista australiana se está llenando de billetes por las centenares de solicitudes de vestidos de baño, para las musulmanas arriesgadas, desde Europa, Norte América y África. Bañadores que solamente dejan al descubierto los pies, las manos y el rostro de las bañistas musulmanas.


La noticia completa está en el blog Casualidad.es que difunde "Noticias insólitas y curiosas del mundo" en donde encontrará detalles interesantes.


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