domingo, 29 de julio de 2007

NO MATARÁS

Muchas ideas me dan vueltas en la cabeza al querer escribir desde hace días sobre las guerras. Por qué nos matamos, quienes nos obligan o a qué se debe la facilidad con que nos dejamos convencer u obligamos a otros a matar.

No siendo totalmente creacionista busco en lo poco que se en qué momento de la evolución se formó en el ADN ese gen universal de tendencia belicosa, guerrera, violenta y asesina.

Por qué Caín tuvo que matar a Abel, David a Goliat o el mismo David ordenar a otros para quedarse con esposa ajena. El Antiguo testamento está inundado de sangre antes y después del Diluvio. Algunas veces me atrevo a pensar con horror que la sabiduría del Creador no encontró otra forma mejor para triunfar, castigar, conquistar, ejemplarizar y hasta para redimir. Sangre habrá a raudales en el final y grandioso genocidio anunciado en el libro sagrado del Apocalipsis.

¡Sangre, sangre! Sangre vertida perversamente en el asesinato o para glorificar. Sangre derramada y a derramar por el cristianismo y el islamismo, por los narcóticos o el simple poder en Irlanda, en Palestina, Irak (shiitas v.s. sunníes), Afganistán (talibanes contra el mundo), en donde usted ponga la mirada sobre el globo terráqueo. En Brasil, Colombia, Honduras, México (250 mil muertes en la Guerra Cristera durante 15 años), Estados Unidos (32 estudiantes masacrados en la universidad de Virginia Tech)...los balcanes, Rusia, los genocidios étnicos y religiosos en Boznia-Hersegovina, la depuración de Mao en la Revolución cultural...

Es tal la costumbre a la muerte en los tiempos modernos que a duras penas nos conmueve el recuerdo del genocidio nazi en los campos de concentración, las purgas de Stalin, las matanzas consentidas por el Vaticano (Pio XII, a quien piensan elevar como el "Santo del silencio") en las mismas catacumbas de Roma (Diez italianos por cada soldado alemán asesinado), el arrume de cadáveres en Camboya (casi dos millones de encarcelados, torturados, asesinados), los miles y miles de sacrificados sin piedad como conejillos de indias en nombre de la ciencia en China y Alemania durante las grandes guerras (72 millones entre muertos y desaparecidos).

Los 148 shiitas gaseados por Sadam Hussein que le costó la pena de muerte, los 130 mil japoneses pulverizados e irradiados en Hiroshima y Nagasaky ("El suceso más grandioso de la historia" en palabras del presidente Truman), la guerra Irak-Irán (mas de un millón de muertos), los once diputados asesinados recientemente y los miles enterrados, ahogados, descuartizados o desaparecidos tanto por guerrilla como por paramilitares en Colombia.



9.700 los muertos en la guerra de Irak en lo corrido de este año según cálculos conservadores. 150 mil desde marzo del 2003. Me pregunto el por qué y para qué. Por qué este precio.



¡Dónde estás Dios mío! Qué caro cuesta vivir en el mundo que nos diste.

Fotografías: Primera, quinta y sexta de la AFP tomadas del portal Univisión, Irak. Segunda, de dominio público, tomada de Segunda Guerra Mundial. Osario Pol Pot, tomado de portal BBC.

12 comentarios:

Carlos Julio dijo...

Saludos Don Jorge.

Es triste y doloroso recordar esos eventos pasados y actuales de la despiadada sed de sangre por parte del hombre.

Lastimosamente la decadencia moral y la enjuta (o casi inexistente) misericordia humana, abren el telón a una tétrica y estadística palabra de "tolerancia".

Lo que pasó en tu país (11 diputados), el "holocausto" nazi, los cristianos coreanos, 11 de septiembre, las guerras en medio oriente, las estratagemas de las guerras frías y sus consecuencias, el incansable lucro del petróleo de las grandes potencias y el deterioro ambiental de nuestro único hogar y tantas cosas más por venir, son el dicho de la Palabra cumplida y que aún está por cumplirse, hasta la segunda llegada de Jesús el Cristo a la tierra.

Solo después del día del juicio será borrado este capítulo triste de toda la historia humana y brillará la Paz en Jesús.

Pero hasta entonces, el hombre correrá inevitablemente su perverso destino de destruir y autodestruirse.

Un abrazo desde Ecuador. Bendiciones.

Anónimo dijo...

Qué interesante artículo. Me parece que el matar en la actualidad tiene que ver con la ausencia de amor y conocimiento del amor de Dios. En la antiguedad la gente vivía bajo la ley y no bajo la gracia, por ello quien quebrantaba la ley era considerado indigno de vivir.

Carlos Julio dijo...

Saludos

Así es anónimo. Aunque el hombre no necesariamente mata físicamente a sus semejantes, a veces sí lo hacemos con hechos o palabras.

En donde sí hay se refleja una matanza innecesaria es un nuestra flora y fauna.

En el caso de mi país se ha decretado un mandato triste para nuestra ecología, el cual detallo a continuación:

Aleta mortal

Bendiciones desde Ecuador

Carlos Julio

Don Jorge dijo...

Gracias a Carlos y a Anónimo por sus comentarios. He investigado a la luz de las Escrituras y he encontrado no solamente la razón si no el cómo y el quien "detrás de bambalinas". No basta invocar el amor a Dios; hay que conocerlo y sentirlo estudiando las Escrituras.

Carlos Correa dijo...

Don jorge tan inpactante es este articulo, como el hecho de no saber el futuro de nuestra humanidad si seguimos alejados de Dios... perdidos en la urgencia de suplir nuestras necesidades, sin pensar en nadie más sin importar nada más ... y sobre la biblia, si la gente leyera un versiculo por día, seguro que seria un gran día ....

Carlos Correa dijo...

Don jorge yo qué le digo por su comentario... Gracias...Sé que usted un hombre de comunicación y letras entedera lo significante y relevante de esta palabra. Recibir un comentario como el suyo alienta pero aterriza. Tambíen agradesco que viera, pero por sobre todo que mencionara mis errores -creame, los trato de pulir día a día- pero hasta Gabo pelió con la ortografía - tan presuntuoso ¡verdad! - espero que estemos en contacto.

Un abrazo y un saludo desde la fria pero siempre hermosa Bogotá.

Don Jorge dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Don Jorge dijo...

Mi estimado Carlos Correa, me alegró recibir tus comentarios. Ellos son como el aplauso para los artistas. Efectivamente el desprendimiento espiritual nos ha deshumanizado como en su página permanentemente lo recuerdo Carlos Julio Pérez desde Manta, Ecuador, en su blog.
Creo me perdonaste el atrevimiento de señalarte unos yerros, pero es que esta costumbre mía de trasmitir lo que se para colaborar con los demás, me ha quedado desde que fui pedagogo en el SENA. De nuevo, gracias por tus comentarios y seguro que seguiremos comunicándonos. Cuando puedas mete un vínculo RSS para recibir actualizaciones. Por lo pronto ya estás en mis vínculos.

FALENAZUL dijo...

Don Jorge...muchas gracias por sus comentarios sobre mis fotografías y por haberse tomado el tiempo de mirar mi página. Sin embargo, me agradaría aclararle que como periodista también tengo muchísimo futuro...soy muy buena en mi profesión. Nuevamente, gracias por su opinión y siempre será un placer recibir su visita en mi fotoblog.

Anónimo dijo...

La gran verdad es que por muy triste y malsano que nos parezca hay muchìsima gente que vive de la guerra,los fabricantes de armamentos,los polìticos que juegan a la guerra como los niñas a las casitas, solo basta sentarse a ver la tv y en los noticieros solo vemos muertos y màs muertos.
Cuando vemos una pelicula de corte històrico donde se reflejan los temas bèlicos son justificadas las escenas porque nos recuerdan los horrores que hemos vivido y que debemos tratar de evitar aunque sea con la crìtica, sin embargo la producciòn de pelìculas estimulando los abusos y las matanzas son la orden del dìa.
Lo màs deplorable es que gran nùmero de personas las disfrutan.
saludos

la lola

Don Jorge dijo...

Lola: Quienes amablemente han participado en los comentarios a mi artículo ven este desangre mundial como un cumplimiento de profecías religiosas en donde el milenario triunfo del mal se nutre del desapego del amor a Dios con sus derivaciones de ambición, soberbia, envidia, desobediencia y demás que se encuentran inventariados en 2 Timoteo 3:1-5. Mas, apartándonos de las creencias religiosas, usted apunta concretamente a la ambición por el dinero. Me hace usted recordar los títulos Los Mercaderes de la Guerra y Los Secretos del Liderazgo, éste último de Santiago Camacho, traducido como Las Cloacas del Imperio.Tomando únicamente la línea de los Bush se encuentra que el abuelo del actual presidente de los EE UU proporcionó, de sus industrias asociadas con un emporio alemán, "los medios para construir más de un tercio de la maquinaria de guerra nazi, algo que le valió para que, una vez terminada la guerra, los Bush disfrutaran de una inmensa fortuna." La cita es tomada de la publicación Wall Street and the Rise of Hitler, del norteamericano Antony Sutton. Se apoya el autor en los siguientes cálculos de suministros, entre otros: 30 a 58% de hierros y aceros y 35 al 45% de explosivos, cobre, tubos y conductos, necesarios para la construcción de blindados, aviones, tanques y cañones. Terminada la Segunda Guerra y mediante una hábil maniobra política se libró de ser acusado de traidor a la patria. Este es un pequeño ejemplo a lo que usted cita, sin olvidar que ese antepasado de los Bush también hizo fortuna en la primera guerra en asocio con la Remington, suministrando munición de guerra.También fueron suministros del régimen Nazi la IBM y la Standard Oil entre otros grandes gigantes de la industria norteamericana. En lo del petróleo aparece Bush padre quien se inició en el negocio fundando la empresa Zapata Oil y desde entonces se le involucra como participante activo con nexos ocultos a la CIA en lo de la frustrada invasión de Bahía Cochinos en Cuba, la muerte del padre de Osama bin Laden cuando siendo amigo de los Bush volaba sobre campos petroleros de la familia. Hipótesis se tejen respecto al petróleo de Irak recordando que uno de sus grandes Halcones del gabinete es copropietario de la Halliburton con intereses en la exploración petrolera en ese país en guerra. Ahora, echar toda la culpa al clan de los Bush sería injusto. Ellos son una parte casi minúscula del sistema de mercados que hace del imperio norteamericano, aunque nos pese, el mejor de otros sistemas desaparecidos y por desaparecer, en asocio con grandes capitales europeos. Si le queda tiempo, lea mi artículo sobre las sociedades secretas y que titulé Trazadores del Destino en el enlace http://pitalituno.blogspot.com/2007/07/trazadores-del-destino.html
Gracias por su aporte y por visitar mi sitio.

astrid stocker dijo...

Mi querido don Jorge
Es dificil creer que este mundo lo hacemos nosotros...si en 2000 a�os el hombre no ha evolucionando espiritualmente, el futuro se ve a�n mas dosolador.... mi sentir es que urge una revoluci�n espiritual, darle al dinero su debido lugar...como medio y no como un fin. Una revoluci�n espiritual donde se equilibre el esp�tu y la materia.
Exelente árticulo.

Un abrazo desde
Chile